El día de Sant Jordi, paseando a la busca de libros,
nos volvimos a fijar en el cruce de Avda. Diagonal con c / Enric Granados
(“lado Mar”) y con c / Tusset (“lado Montaña”). Sus cuatro edificios son verdaderas
estrellas de la arquitectura barcelonesa. Son un breve curso de Historia de la
Arquitectura de Barcelona en el S. XX. Cada uno representa uno de los cuatro
grandes momentos de nuestra arquitectura moderna: Modernisme (entre 1900 y
1915), Noucentisme (hacia 1920),
Racionalisme GATPAC (hacia 1930) y Movimiento Moderno (hacia 1990).
Casa
Sayrach - Arquitecto Manuel Sayrach –
Modernisme - 1915
Este
bloque de viviendas modernista, lado Mar, es una cita de La Pedrera. Su autor, discípulo
de Gaudí e hijo de los dueños de la casa, no pudo firmar el proyecto, porque todavía
no tenía el título de arquitecto.
La Casa
Sayrach tiene un desmadrado exterior blanco, con torres y añadidos, que le
dieron el nombre de “Casa dels Ossos”; versión blanda de la dura Pedrera. Su interior es aún más creativo: vestíbulo y escalera son casi surrealistas.
Casa Mas
de Miquel – Arquitecto Domingo
Sugrañes – Noucentisme – 1923
Este antiguo
hotel y actual bloque de viviendas y oficinas, lado Montaña, noucentista monumentalista
de los años 20 tiene de todo, de planteamientos neobarrocos o clasicistas a
referencias a la arquitectura de París (o Budapest) de fin de Siglo XIX.
También tiene un interior espectacular, con un enorme patio, cubierto por una
claraboya, al que dan todos los pisos.
Bloc
Diagonal – Arquitectos Ricardo
de Churruca y Germán Rodríguez Arias – GATPAC – 1935
Este
edifico de viviendas, lado Mar, es la máxima obra del racionalismo GATPAC,
republicano y socialdemócrata, en Barcelona. El GATPAC pretendió una reforma
urbanística y arquitectónica para la ciudad, que fuese más vivible y asequible
a las clases populares. Se habla de su pureza de líneas, detalles elegantes,
diseño racional.
Edificio Habitat - Metro 3 – Arquitectos Correa y Milà – Movimiento Moderno
– 1985
El
último gran edificio, esta vez de oficinas, lado Montaña es este edificio de
uno de los estudios arquitectónicos más conocidos de Barcelona. Sus líneas
modernas, su fachada metálica y acristalada, su color granate, se adaptan al
entorno, gracias a un diseño razonable y lleno de referencias a la arquitectura
tradicional burguesa de la ciudad, como las tribunas de las esquinas.
Un buen resumen, pues, de dos siglos de arquitectura de Barcelona, en cuatro esquinas, sólo separadas unos metros.
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